Figura Empresarial: JOSÉ SÁNCHEZ QUESADA / Abrasivos Alicante

NACER EN UNA CRISIS

Abrasivos Alicante remonta sus orígenes al año 1993, cuando José Sánchez decide unir su trayectoria laboral y sus conocimientos con la juventud y el carácter emprendedor de sus hijos.

Por aquel entonces este Licenciado en Magisterio no practicante ya había desarrollado un largo camino como agente comercial dentro de varios sectores productivos especialmente el de productos dedicados al tratamiento de la piedra o como José la llama, “la industria de las toneladas”.

A los 60 años, su carácter inquieto, su curiosidad por cuanto le rodea, su afición por la química y los laboratorios y esa virtud que sólo unos pocos tienen de aprender constantemente le hacen tomar una decisión que a la vista de los resultados ha sido satisfactoria; – “ante la disyuntiva de un futuro disfrutando de la jubilación o de un futuro profesional para mis hijos, opté por el segundo camino, asumir el reto, los riesgos y el miedo de emprender un proyecto. Todo ello con la negra perspectiva de la crisis de 1993. Pero el tiempo no me ha quitado la razón”-.

Y es dentro de una crisis donde nace Abrasivos Alicante, no en vano, los primeros años fueron muy duros. Como afirma David “los tres primeros años fueron de duro aprendizaje. Nuestro padre dio un paso atrás al frente de la empresa y Rubén y yo íbamos poco a poco cogiendo las riendas del negocio. Todo lo hacíamos nosotros tres, investigábamos, producíamos, repartíamos el producto y gestionábamos los pagos y a eso había que sumarle nuestra juventud y un entorno por entonces hostil. Durante ese tiempo te das cuenta que en la calle sirve de bien poco lo que has aprendido en la universidad y tienes que reinventarte o morir”-.

Pero la voluntad y el ingenio fue más fuerte que los obstáculos que iban apareciendo. “Partimos de mi experiencia previa en los abrasivos dirigidos al sector de la piedra. En un primer momento con un solo producto y con la poca ambición de sobrevivir con el fruto de nuestro trabajo.

Pero pronto surgieron los miedos y las incertidumbres ante posibles problemas con el producto, la dura competencia, la pérdida de ingresos o la escasa liquidez. Te das cuenta de que hay que ir más allá, ampliar con imaginación la línea de productos y no limitarnos comercialmente a un mercado o un sector. Había que abrir puertas y eso lo hicimos con muchas horas de investigación propia, muchos ensayos y errores y sobre todo ilusión”-.

INVESTIGACIÓN, INNOVACIÓN Y DIVERSIFICACIÓN COMO ARMAS ANTE LA CRISIS

Estos términos suenan a tópicos en este periodo de crisis, pero para muchas empresas han sido una verdadera tabla de salvación ante el naufragio generalizado. Como señala Rubén, encargado de la parcela de ingeniería, -“no sólo hicimos esfuerzos para desarrollar nuevos productos, sino que también desarrollamos la maquinaria para fabricarlos, de hecho tenemos varias patentes y modelos de utilidad”-.

-“Todo empresario debe permanecer atento a las oportunidades, rastreando continuamente las necesidades de sus clientes y obteniendo de ellas nuevos productos que satisfagan esas demandas a la vez que generalizamos la solución del problema para otros clientes con idénticos problemas. En mi caso siempre he estado en búsqueda del producto perfecto, hasta he soñado muchas veces con él”-, afirma José Sánchez.

Esta es una constante en Abrasivos Alicante, de hecho todos los años ponen en el mercado nuevos productos que les permiten estar a la vanguardia mundial dentro de su sector.

DE ALICANTE AL MUNDO: INTERNACIONALIZACIÓN PARA REDUCIR RIESGOS

Abrasivos Alicante ha visto como su pequeña nave industrial del Polígono de Aguamarga fue creciendo con los años hasta que en el año 2000 se trasladaron a sus instalaciones actuales en Las Atalayas y desde aquí han extendido sus productos al resto del mundo.

Y es que la internacionalización ha cambiado por completo las expectativas iniciales. “En un primer momento teníamos la intención de abarcar el mercado más cercano, dirigir nuestro único producto a las fabricas de piedra y mármol de Novelda, Almería o de la provincia de Valencia, pero los miedos y el camino que íbamos recorriendo nos iba dando nuevas pistas”-, afirma José.

Uno de los hitos principales con el que comenzaron a abrir las fronteras fue la asistencia a su primera feria dentro del sector, en Verona, allá por el año 19–, según David, -“la feria fue toda una revelación y además toda una aventura. Teníamos la feria ya cerrada y de repente nos dimos cuenta de que no teníamos ni idea de hablar italiano por lo que mi padre rápidamente puso solución contratando una profesora particular semanas antes de asistir al evento. Allí nos empezamos a dar cuenta de que lo que ofrecíamos al mercado nacional podía servir para cualquier parte del mundo”-.

Esta apreciación sirvió para convertir a Abrasivos Alicante en una de las empresas con mayor distribución a nivel mundial y con más diversificación en su cartera de productos, -“distribuimos nuestros productos a cerca de 70 países de los que 25 generan una demanda constante de material. El 70-80% de nuestra facturación proviene de la demanda exterior. Al mercado nacional seguimos sirviendo productos porque hemos hecho un gran esfuerzo comercial, pero se ha visto muy mermado por la crisis de la construcción.

Andamos siempre a la búsqueda de mercados emergentes lo que nos está dando destacables resultados como por ejemplo en Argelia, Irán, Marruecos y algunos de Sudamérica, además de seguir teniendo buenas ventas en países de la Unión Europea como Portugal o Italia, este último cuna de nuestros principales competidores del sector”-.
Especial mención requiere Brasil en el que recientemente se ha abierto una filial en la que se está trabajando con empleados autóctonos.

En cuanto a la apertura de mercados cabe destacar el estudio previó que realizan de los mismos, aprovechando las sinergias captadas en ferias o a través de clientes y proveedores. “Muchas veces le damos más valor a los canales abiertos que a la potencialidad de un país para aceptar nuestro producto y es que entrar en un país sin conocimientos asentados te hace incurrir en más gastos que beneficios”-.

¿CRISIS PARA TODOS?

La crisis parece haber afectado a todo el tejido empresarial, pero está claro que no todos han sufrido el mismo grado de daño. “Algunos de nuestros principales clientes en España se han visto seriamente dañados por la crisis del ladrillo y los que sobreviven es gracias a la exportación. Con el boom del ladrillo había hueco en el mercado para la piedra nacional y para la piedra que saliendo de aquí, era tratada en China, disminuyendo el precio y la calidad del producto. Ahora sólo hay espacio para el producto que viene de fuera”- apunta David Sánchez.

El tejido empresarial del sector de la piedra alicantino y por extensión, el nacional, está seriamente dañado y será difícil de reconstruir a corto y medio plazo pero hay que mantener una actitud positiva ante la coyuntura, como afirma David, -“no hay que bajar los brazos y enfocar la crisis desde el punto de vista de las oportunidades. La globalización actual hace que puedas encontrar nichos de mercado en los que pueden encajar perfectamente tu producto o servicio. He de reconocer que no es una tarea fácil pero hay que seguir el camino de la innovación, la diversificación y la internacionalización”-.

Para José Sánchez la solución a esta situación viene dada por “la vía de más trabajo y siempre con miras al exterior. Tenemos que dejar de lamentarnos e intentar buscar la solución allí donde esta se encuentre, la idea es internacionalizar, importar ideas y exportar soluciones”-.

UNA TRAYECTORIA SIN ALTIBAJOS

El camino abierto por Abrasivos Alicante no ha sido fácil. Sus complicados inicios y el traspaso de responsabilidad de José Sánchez hacia la segunda generación familiar de empresarios, han dado paso a una trayectoria empresarial sin altibajos, en constante crecimiento gracias a su espíritu innovador, siempre con las ideas muy claras. “Nunca hemos creído en la cultura del pelotazo que ha llegado a desbordar a algunos sectores en este país, nuestro padre nos enseña cada día que el camino se hace caminando, con ilusión por lo que haces y con la mentalidad siempre dispuesta a aprovechar las oportunidades y nosotros estamos dispuesto a seguir creyendo en esas máximas porque el tiempo nos ha demostrado que así es”- sentencia David Sánchez.

EL TRIUNFO DE LA CONSTANCIA FAMILIAR

Abrasivos Alicante ha seguido a lo largo de su existencia los patrones propios de una empresa familiar.

Estos patrones incluyen valores tales como la dedicación, la constancia, la calidad, la tradición y el trato directo, mezclada con un carácter empresarial innovador que ha servido para convertir el germen de un pequeño proyecto en una realidad exitosa, hasta el punto de poder sortear la actual coyuntura económica con cierta tranquilidad.

Su fundador José Sánchez y sus dos hijos, David y Rubén han ofrecido a Atalayas Empresarial algunas de las claves para hacer esto posible.